El pasado 18 de noviembre, un episodio de furia se desató a partir de un choque, entre una camioneta y un colectivo de la línea 109, en el cruce de la Av. Córdoba y Ecuador, en la ciudad porteña. El conductor de la camioneta, Osvaldo Gagliardi (48), reacciónó adelantándose y cruzándola delante del colectivo, conducido por José Valdez (33), luego se bajó del rodado y descontrolado, le propinó 13 fuertes golpes, rompiendo varias ventanillas.
Mientras tanto, Valdez avanzó el colectivo chocando y arrastrando a la camioneta. Ambos conductores fueron acusados del delito de daño. Afortunadamente no hubo lesionados. Pero no siempre las historias terminan igual.
Tal es el caso del triple choque ocurrido el pasado domingo 22, por la noche, en la ruta 210, a la altura de Alejandro Korn, en GBA. Por causas no precisadas, el coche conducido por Cristian Fredes, en el que viajaba con su esposa y su bebé, fue chocado violentamente de atrás por otro auto al mando de Gustavo Mantegazza, el cual fue, a su vez, embestido por otro vehículo conducido por Brian Calla, instructor de boxeo, con antecedentes delictivos, quien, según testimonió la esposa de la víctima, se bajó del coche furioso y agredió a puñetazos a Fredes hasta provocarle la muerte y también a su cuñado que salió en su defensa, a quien dejó inconsciente y con fractura de cráneo.
El tránsito nos obliga a compartir el espacio de la vía pública, y pone a prueba nuestra capacidad para convivir y tolerar frustraciones. Muchas veces, es poca la paciencia. En una encuesta realizada por Luchemos por la Vida, entre conductores de vehículos, de ambos sexos, el 53% reconoció que insultaba y/o gesticulaba a otro conductor que lo molestaba con sus maniobras, y 1 de cada 10 conductores varones, alguna vez, se había trenzado físicamente en una pelea por el tránsito. Es muy importante estar atento y tener autocontrol para no reaccionar a los conductores agresivos, evitar provocarlos o engancharse con sus provocaciones para evitar choques o situaciones de violencia con riesgo de vida. Más aún en estos difíciles tiempos de pandemia.
Algunos consejos para evitar a los agresivos al volante:
- No provoque. Ya sea, encerrando al sobrepasar, circulando más despacio por el carril izquierdo, pegándose atrás de un vehículo o haciendo gestos obscenos.
- No se enganche. Un conductor enojado no puede empezar una pelea a menos que el otro se enganche. Usted puede protegerse de los conductores furiosos evitando enojarse con ellos.
- No responda a una provocación. No lo provoque con la mirada. Si piensa que el otro conductor lo está siguiendo o intentando comenzar una pelea, pida ayuda, deteniéndose en un sitio con gente.
- Ponga distancia. Dele a los conductores enojados mucho espacio en el camino.
- No lo tome como algo personal. Manténgase sereno y no tome las acciones de los otros conductores como algo personal contra usted. Piense que el otro puede tener algún problema serio, que lo motiva a esa acción.
- No compita con los demás conductores. Usted no necesita demostrarle a nadie su valor o su razón.
- Procure mantener la calma.
- Su mayor éxito consiste en llegar a destino sano y salvo.