Este miércoles por la mañana más de una decena de entidades gremiales acompañaron a los Sindicatos de Trabajadores Municipales, ATE y el Sindicato de Empleados Municipales en una importante movilización: El reclamo «un salario digno» y rechazando las «paritarias de hambre». Hubo serios incidentes.
Desde tempano se había cortado el tránsito en la esquina de Mariano Moreno y San Martín. La zona estaba custodiada por una fuerte cantidad de efectivos de la Policía Bonaerense y la Policía Local. La puerta principal de ingreso al palacio comunal estaba cerrada. Esa fue la antesala de lo que sería una contundente movilización convocada por los Sindicatos que nuclean a los trabajadores municipales.
Este miércoles minutos antes de las 10 de la mañana, distintas columnas de trabajadores municipales y gremios que adhirieron a la marcha confluyeron provenientes de distintos puntos en San Martín al 500, en la puerta del Municipio. A los trabajadores que se hallaban desarrollando sus labores en el palacio comunal se les dio asueto.
Al llegar al lugar todas las columnas de trabajadores y encabezados por algunos militantes políticos, se dispusieron a entrar a la casa municipal. Al llegar a la puerta, los efectivos policiales quisieron impedir la entrada de los mismos. Allí una militante del sector político de Miguel Prince discutió con la policía al querer hacer ingresar a los trabajadores al edificio del municipio. Detrás de ella, un trabajador municipal forcejeó con la policía que intentó reducirlo y lo logró. Fue liberado por pedido de los gremios. La muchedumbre ingresó finalmente al municipio: Tiraron pirotecnia e hicieron sonar bombos y redoblantes y se retiraron.
La manifestación estuvo acompañada por más de una decena de sindicatos enrolados en la «Corriente Federal», más otros gremios de municipales de distintos distritos bonaerenses. Además de la FESIMUBO, la Federación de Sindicatos de Municipales Bonaerenses.
La multitudinaria movilización propiciada por el Sindicato de Trabajadores Municipales, el de Empleados Municipales y ATE, tuvo por objeto hacerle saber al gobierno de Oscar Luciani la disconformidad con el aumento salarial del 22% ofrecido en la última reunión paritaria. También se trata de una demostración de fuerza de los gremios, que llevan 21 días consecutivos de paro.