Como viene ocurriendo en las últimas temporadas, este miércoles, con la llegada de la Primavera, la Municipalidad acompañó una vez más los festejos de los jóvenes de Suipacha en el clásico Fogón, que recuperó el espíritu de camaradería y buena onda que se había empezado a perder por los hechos violentos que se habían producido años atrás.
Con el apoyo de la secretaría de Cultura y su Dirección de eventos, los jóvenes de Suipacha recibieron la estación de las flores y festejaron el Día del Estudiante sin violencia y con muy buena onda.
De la fiesta participaron los colegios locales, con sus banderas y canciones, dándole el colorido característico a la fecha.
En el escenario, que este año integró música en vivo y DJ’s, brilló la joven voz de Martina Arroche junto a su banda, quienes abrieron el evento con una presentación llena de clásicos del rock y el pop.
Enseguida subieron al escenario las chicas de Melomanía, con su repertorio de Rock and roll que las sigue consagrando entre las promesas de la música de nuestra ciudad.
Enseguida se produjo la esperada entrada de los colegios.
Cuando todos los chicos, animados por Esteban Arce, ya estaban pasándola muy bien en la calle, empezó a sonar DJ Roman, quien la rompió con su set de temas superbailables.
Por su parte, y jugando de local, DJ Agustín García también hizo una gran presentación, poniéndole buena onda a la fiesta, que terminó a la medianoche y llegó a reunir a una verdadera multitud en la Plaza.
EL LAMENTABLE USO DE PIROTECNIA
En el evento hubo un momento que generó malestar a muchos vecinos cuando se produjeron algunos estallidos de pirotecnia sonora, desafiando la ordenanza que prohíbe su uso.
Este tipo de actitudes, que pertenece a unos pocos, no tiene nada que ver con el espíritu general del evento, en el que fueron una amplísima mayoría los chicos que festejaron pacíficamente en un entorno en el que las familias acudieron a acompañarlos y compartir la alegría de la jornada. Pero esas pocas detonaciones validaron críticas en redes sociales por parte de quienes escucharon los ruidos desde sus casas.
Desde la Secretaría de Cultura se habían realizado varias reuniones para aclarar las reglas de convivencia que se respetarían en la fiesta, entre las que se había aclarado que no se usaría pirotecnia sonora. Cabe esperar que chicos y padres reflexionen sobre el perjuicio que estas actitudes generan a los animales y a muchas personas que por diversos motivos son sensibles a los ruidos, para que en el futuro no se repitan esta clase de episodios.