Luego de dos meses y veinticuatro días recorriendo aproximadamente 1300 kilómetros, en una conmovedora muestra de Fe, el tucumano Dante Paunero arribó este viernes cerca de las 15 a la Basílica de Nuestra Señora de Luján. Fue recibido por autoridades de la Dirección de Turismo en la rotonda de 25 de Mayo y Avenida Nuestra Señora de Luján y por el Padre Lucas García, rector del templo. Asistió a misa acompañado de fieles de Rojas que lo albergaron en su casa en el camino hacía Luján y de Moreno donde pasará la noche este viernes.
«Dante Emilio Paunero peregrina hasta el Santuario de la Virgen de Luján. Tiene 71 años y salió caminando desde Manantiales (Tucumán) por una promesa cumplida por la Virgen, -y esto es lo asombroso- no para él, sino para una persona casi desconocida para él que no podía ser mamá… Él era pintor en la casa de esta señora que no podía quedar embarazada. Le pidió a la señora que confíe en Dios y que intente de nuevo, mientras que él le hizo una promesa a la Virgen… la hija de la señora ya ahora tiene 6 años y lleva un hermoso nombre, Luján».
«En 2019 peregrinó a Lujan en bicicleta (y a la bicicleta la dejó como ofrenda a la Virgen en Luján), ahora lo hace a pie. No pide dinero, ni siquiera comida, porque dice que él se arregla, aunque recibe con muchísimo agradecimiento algo calentito para comer, bañarse o dormir. Es sumamente confiable, y quién lo recibe recibe a un verdadero misionero de la fe en Jesucristo, Nuestro Señor, de la Providencia Divina y de la Santísima Virgen», contó al diario digital «Globo Rojo» de Rojas el sacerdote cordobés Darío Manero.
«Desea caminar sólo, mientras reza… A las 15 de cada día se detiene para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia», agregó, «me hace recordar a la italiana doña Emma, que hace 7 años pasó por Bell Ville, también peregrinando», cerró.
El equipo de TRIBUNA DEL PUEBLO siguió los pasos de Dante desde su llegada a Carmen de Areco el pasado domingo. El miércoles llegó caminando hasta el peaje de Villa Espil a unos 22 kilómetros de Luján. Ese día pasó la noche en una habitación reservada del Hospital San Andrés y el jueves retomó camino desde Villa Espil hasta llegar a Cortínez, a unos 10 kilómetros de la Basílica. Este viernes estaba todo listo para que el «abuelo peregrino» llegase a Luján.
Así fue que pasado el mediodía de este viernes los cronistas de TRIBUNA DEL PUEBLO salieron a su encuentro: Lo divisaron a la altura de la Ruta 7 casi llegando al Camino a Carlos Keen. Intercambiaron unas palabras y se decidieron a ir a esperarlo a la Plaza Belgrano, contigua a la Basílica Nacional de Nuestra Señora de Luján.
Allí llegó Dante casi a la hora 15. Venía acompañado por un grupo de personas de la localidad bonaerense de Rojas y por amigos suyos de Moreno. Fue absolutamente estremecedor ver llegar al hombre que recorrió casi 1300 kilómetros por un acto de Fé inquebrantable.
Con gran recogimiento ingresó a la casa de la Virgen de Luján, la veneró, recorrió el camarín, asistió a misa y fue recibido por el Padre Lucas García, rector del Santuario.
Una muestra de Fe que anima a los corazones cristianos y a los que no lo son a creer que hay un poder superior que nos bendice.