La joven dirigente, oriunda de San Cayetano, fue elegida para presidir el congreso de la Juventud Radical, que es uno de los órganos más importantes del la UCR. Cada mandato dura dos años, como ocurre con la presidencia de la JR, y existen unos 92 congresales, que están divididos en las ocho secciones electorales que tiene la provincia de Buenos Aires.
Para llegar a ser presidenta del congreso, Melisa Juárez, junto al resto de los integrantes de su nómina, obtuvo un gran apoyo de los congresales de las ocho secciones electorales de la provincia.
La flamante presidenta del congreso viene de desempeñarse como vicepresidenta de la Juventud Radical como parte de la JR Vanguardia, que tiene como máximo referente al diputado provincial y titular de la UCR bonaerense, Maximiliano Abad.
Juárez aseveró que “esta juventud, la de ayer, la de hoy y la que viene lo va a acompañar a ´Maxi´ y a toda la conducción del radicalismo para que tengamos un candidato en el 2023 y que sea la UCR la que conduzca la coalición de gobierno”.
Abad, jefe de los diputados de Cambiemos en la Legislatura bonaerense, puso a la UCR en la cancha y apuesta al crecimiento de la juventud para consolidar el liderazgo del partido dentro de la coalición.
«Cuando el radicalismo de la provincia de Buenos Aires está fuerte, el radicalismo nacional se fortalece, incide en la política nacional e incide en lo institucional», dijo Abad en el multitudinario acto en Ferro, que contó con un gran apoyo de la Juventud de la Provincia.
Haciendo referencia a la actualidad, Melisa Juárez expresó: «Veo con mucho ánimo, seguridad y orgullo al radicalismo que estamos teniendo y como joven siempre acompañando para crecer y progresar. Hoy el partido discute vocación de poder y eso entusiasma. Es un nuevo respirar, estamos fuertes y volvimos a la escena de la política”.
Por último, en cuanto a su objetivo y de la juventud, Juárez señaló: “Como espacio creemos que ya estamos capacitados para ocupar cualquier tipo de cargos. Trabajamos y nos nutrimos de las experiencias de otros correligionarios. Y sobre el mío propio, no me puse una meta sino que sigo trabajando para que este radicalismo sea cada vez más grande”.
