El COVID – 19 en Luján: “Una cosa es la enfermad pandémica y otra cosa la cuarentena”

Escribe el Dr. Luis A. ANDRIEU Medico Sanitarista MN 69588 – MP 80564

*“¿De qué cuarentena me hablan?” preguntó el Presidente*

Lo dijimos ya en el primer informe de esta serie para tratar de aclarar el uso y confusión de la terminología. Fundamentalmente en materia de comunicación por parte del Estado. La enfermedad pandémica, como hoy es el COVID-19 está producida por un germen, en este caso un coronavirus que ataca al ser humano mediante una afección sobre el sistema respiratorio en diferentes estadios de gravedad. Es decir, está producida por acción de la naturaleza y no depende de la voluntad humana, de la sociedad, de las organizaciones o los estados.

La CUARENTENA es una medida adoptada por la administración política del Estado, como estrategia para evitar la propagación de la enfermedad.  En nuestro caso, en primer lugar, se estableció la CUARENTENA, además como estrategia para armar, equipar, adquirir bienes y servicios para el tratamiento y atención de los pacientes que posteriormente aparcarían infectados.

La estrategia elegida fue establecer una CUARENTENA AMPLIA Y TOTAL, es decir territorialmente ocupando la totalidad del país y todas las personas que se encontraban en nuestro territorio o se reincorporaran en los días siguientes. Para ser absolutamente claros no se diferenció territorio donde hubiese “casos”, ni personas infectadas, contactos cercanos y estrechos y población en riesgo, más aún contando ya con más de 100 días de desarrollo de la PANDEMIA en otras partes del mundo. Es decir, había ya un rápido aprendizaje de las situaciones que se presentaban. Las dos premisas básicas de la necesidad se mostraron en la baja cantidad de equipos de asistencia respiratoria mecánica y mínima cantidad de camas en Unidades de Terapia Intensiva.

Mientras en principio el Ministro de Salud dijo que la epidemia no llegaría desde China y luego que tardaría en llegar, otros funcionarios de las áreas de Salud Publica anunciaban la catástrofe más grande de la historia, hasta con pilas de cadáveres en las esquinas al decir del “militante” (así se denomina él mismo) Kreplak del Min de Salud de la Provincia de Bs.As.

La realidad de la CUARENTENA impuesta por el DNU del Gobierno Nacional, está a la vista, tan a la vista que el Presidente nos dijo el viernes, ¿de qué cuarentena me hablan???” mientras que la mayoría de los residentes en el país soportamos estoicamente las restricciones de todo tipo que están impuestas y a las cuales no podemos evitar, aunque la mayoría de la gente ande por las calles, con barbijo, como si nada más pasara. Pero los trabajadores, las grandes industrias, las obras públicas y privadas, una gran cantidad de actividades se encuentra cerradas sufren la imposibilidad de trabajar y producir para su propio sustento.

¿Sera cierto que no hubo CUARENTENA? Y en todo caso, ¿De quién será la responsabilidad de que se ordene por un DNU y no se haya cumplido? O será que debió adoptarse otra estrategia más inteligente…

Lujan ha sido en este caso, un poco más inteligente: metida de prepo en el AMBA donde nunca perteneció, el sano criterio del Intendente permeable a las sugerencias de los sectores de la comunidad, estableció moderación a la rigidez impuesta por el DNU nacional y directivas aún más estrictas irrazonables e ideologizadas del poder provincial y comenzó hace 15 días a hacer una de las cosas imperiosas que es acudir a la RESPONSABILIDAD SOCIAL de los habitantes. Sobre ello hay que seguir batallando, los contagios no los salva el ESTADO sino nosotros mismos que debemos proteger a la población en riesgo, es decir para ser claros A LOS MAYORES DE 60/65 AÑOS que viven entre nosotros.

En la semana Epidemiológica 22 que va del 9 al 15 de agosto se informaron 4 defunciones, similar a las muertes por COVID en cada una de las 3 semanas anteriores, esta cifra ubica la Tasa de LETALIDAD (Cantidad de fallecidos en relación a la Cantidad de Contagiados) en 2,4% si bien un poco más alta que la de otros distritos de la zona, está considerada dentro del promedio nacional e internacional. La característica de esta semana es que se produjo el fallecimiento de un paciente masculino de 52 años ocurrida en el Hospital Nuestra Señora de Lujan. Cuál es la diferencia, en la totalidad de las semanas anteriores no se había producido la muerte de personas contagiadas por difusión comunitaria con edad menor a los 63 años.

El promedio general de las 22 semanas indica una edad de 74 años para los fallecidos Hombre, mientras que las mujeres fueron promedio 79 años.  Se mantiene también la inversión de los porcentajes por sexo que en el inicio de la pandemia eran mayoritariamente masculinos, ahora son el 48% mientras que las femeninas representan el 52%.

Esta semana se INFORMARON 245 nuevos casos POSITIVOS la que indica un aumento semanal al promedio de las semanas anteriores.  

La cantidad de pacientes recuperados fue de 69 similar a las dos semanas anteriores, marcando un 29% de recuperados. Tengamos en cuenta que el periodo de recuperación en general es superior a los 10 días y llegando hasta los 20 días por lo cual parecería lento, pero no lo es.

Esta semana los centros médicos públicos y privados atendieron 644 personas que presentaban básicamente síntomas que podían ser interpretados como COVID de las cuales se categorizaron 245 como NUEVOS POSITIVOS y se DESCARTARON 399, es decir se rechazaron en promedio el 59% de quienes concurrieron a la consulta.

Otro dato alentador es que 217 pacientes (de los 245 positivos) fueron remitidos a su domicilio a realizar el tratamiento y cuidado (88.5%) y solo 28 requirieron internación en algún centro médico público o privado.

Es muy importante destacar que el índice de duplicación de pacientes infectados, esta semana se mantuvo dentro de los 16 días, siendo un dato alentador, aunque bajo respecto a otras semanas anteriores que estuvieron entre 20 y 24 días.

La tasa de infectados sobre el total de la población del Partido de Lujan, llego el sábado 15 de agosto a 9,08 infectados cada 1000 habitantes.

Y me permito repetir los conceptos del informe anterior ya que siguen totalmente vigentes:

  • La tarea de los equipos, como la de los dirigentes barriales, políticos, los docentes, los “punteros”, hoy debe ser la de concientizar y explicar claramente que no importa el contagio personal de los menores de 65 años para ellos, si no para EVITAR la traslación del virus a los mayores que si son los que pierden la vida. Así de clarito debe ser el mensaje.
  • No se gana nada y ha demostrado el tremendo fracaso la cuarentena declamada que no es responsabilidad de la autoridad local sino de las autoridades políticas de la provincia, de la CABA y de la Nación. Nadie debe sentirse molesto por esto, la epidemia es un problema social y médico, pero la cuarentena es una decisión administrativa de los poderes políticos. NO sirve más generar terror, la exagerada publicidad de los casos de contagios, cuando en realidad el 99% de los casos son insignificantes para la vida. Instauran el terror que no ha servido para nada, y siguen muriendo compatriotas.
  • El periodismo transmitiendo sólo números no sirve si no se los explica y que significan a la gente, esta es la tarea profesional de los que tienen la responsabilidad de informar. Y lamentablemente en Lujan no hay una autoridad con autoridad profesional para hablar del tema: hay una Abogada dedicada a los conflictos de género. El Intendente ha sido el único que insinuó el fin de semana pasado la responsabilidad social: este es el mensaje y es la batalla contra el COVID si no queremos asistir a la muerte de nuestros familiares mayores.

…esto lo resuelve usted, su familia, la comunidad, la gente. No nos quedemos esperando todo de las autoridades sanitarias…

Hasta la semana que viene.