La desesperación frente al avance del coronavirus desató una histeria consumista. En las últimas horas, los supermercados recibieron un aluvión de clientes que corrieron a las sucursales más cercanas para abastecerse de todo tipo de productos, especialmente alimentos, bebidas y artículos de limpieza, que ya se encuentran en escasez.
Una de las primeras en anunciar cambios fue la francesa Carrefour, que fijó un horario especial de atención para aquellas personas que pertenezcan a ese sector etario. A través de carteles, la empresa comunicó que los mayores de 65 tendrán acceso exclusivo en la Sucursal Luján de lunes a sábado a partir de las 8.30.
En este supermercado con afluencia de público, permiten el ingreso a 10 carros, exigiendo que no superen dos personas por cada uno y recomendando que no entren con menores de edad. Funciona así: la renovación se da cuando sale una persona y entonces recién entra la otra, siempre manteniendo la misma cantidad de personas dentro”, explicó el empleado consultado.
Vea dispuso una medida en esa sintonía. Los supermercados propiedad de la firma chilena Cencosud abrirá sus comercios de 7 a 8 solo para los adultos mayores.
Además, a través de su página web, advirtió sobre el posible desabastecimiento de determinados artículos. “Debido a la situación de público conocimiento, la disponibilidad de algunos artículos puede verse afectada momentáneamente. Por favor, les solicitamos llevar la cantidad necesaria para uso familiar y así permitir que todos puedan acceder a los productos. Estamos reforzaron el abastecimiento de los productos básicos”, señala en su portal.
Fuentes del sector coinciden que desde el jueves pasado, una multitud viene arrasando con productos de higiene personal, limpieza y no perecederos de todo tipo, en una estrategia de abastecimiento preventivo frente a una eventual cuarentena obligatoria. «Hay comercios que el domingo vendieron casi lo mismo que en vísperas de Navidad».
La mayor escasez de los productos en los súper son alcohol líquido y en gel, desinfectantes como Lysoform y lavandina y repelentes como Off. «Por el avance del coronavirus y el dengue, en los últimos días tuvimos una fuerte demanda de estos artículos, a tal punto que ya empiezan a faltar en algunas sucursales», explicó personal de una cadena radicada en Luján, y aclararon que, en esta época del año, el consumo de estos artículos suele ser más baja.