Los integrantes de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa se mostraron preocupados por el incremento del inmobiliario rural que contiene el proyecto de Ley del Presupuesto bonaerense 2019.
La capacidad contributiva del campo parece agotarse, al menos así lo manifiestan los productores después de un 2018 marcado por la peor sequía de los últimos 50 años, el aumento de las tasas y el regreso de las retenciones. Tan es así que el proyecto de Ley del Presupuesto bonaerense 2019 incluye como mala noticia para el sector agropecuario un incremento del 38% del Impuesto al Inmobiliario Rural (IRR). Mientras, que por otro lado, como un aspecto «positivo», se propone una disminución de Ingresos Brutos para la actividad primaria que pasaría del 1,5% al 0,75%.
Debido a la preocupación que despertó el incremento del IRR, la semana pasada, integrantes de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) se reunieron en La Plata, con legisladores del bloque oficialista (Cambiemos), también con la oposición: Frente Renovador y Unidad Ciudadana. Si bien recepcionaron los reclamos, desde la entidad gremial son conscientes que el proyecto se decide en el Congreso.
Matías de Velazco, presidente de CARBAP, se refirió a los encuentros establecidos, al gasto público y advirtió sobre las expectativas puestas en la campaña gruesa
«A Cambiemos, le trasladamos la molestia y la disconformidad que está apareciendo en base a la poca obtención de resultados que está teniendo el Gobierno, y por la enorme por la presión impositiva. Ellos lo ven y lo reconocen», señaló el dirigente.
De acuerdo a la mirada de Velazco, al sector productivo ya no le queda más espalda para hacer frente a esta enorme carga fiscal.
El problema que están viendo desde CARBAP, es que el Estado nacional, provincial y municipal se piensan a sí mismos como compartimentos estancos. En este sentido, de Velazco argumentó: «Cada uno se preocupa por su propio equilibrio fiscal, y no están viendo que toda la plata sale del mismo bolsillo».