Se trata de Notre Dame, un local gastronómico ubicado a escasos metros de la Basílica que no permitió que la menor ingiriera una hamburguesa de una cadena de comida rápida en su establecimiento.
El viernes pasado una familia decidió salir a comer afuera, pero lo que no sabían cuando cruzaron la puerta de su casa era que Agustina, la hija menor, iba a ser discriminada por su condición de celíaca.
Como Notre Dame no dispone de un menú para celíacos, los padres de la chica decidieron comprarle un combo que pudiera degustar en una cadena de comida rápida. Ella iba a comer su comida en la cervecería y el resto de la familia iba a elegir un plato del menú del lugar, hasta que un empleado se acercó y les explicó que la niña no podía estar en el restaurante consumiendo alimentos de otro local. Los padres aclararon la condición de celíaca de su hija pero que, en caso de poseer un menú para celíacos, iban a comprar su cena en el restó y guardarían la hamburguesa. La explicación del mozo se repitió.
Una vez dispuestos a irse, el padre logró localizar al dueño del negocio, que les advirtió que en la cocina de Notre Dame no había lugar para cocinar comestibles sin TACC y que, en caso de querer permanecer en el restaurante, la niña debía ingerir su vianda en otro lugar. La celiaquía de Agustina no se contempló en ningún momento.
La menor se sintió muy discriminada y la familia anunció que el hecho fue dado a conocer a las autoridades municipales.