Estudiantes de la Licenciatura en Enfermería de la UNLu desarrollaron una jornada de intervención comunitaria en los barrios Lanusse y Villa del Parque, de Luján, realizada en colaboración con la Dirección de Atención Primaria del municipio.
Se trató de una actividad que tuvo el objetivo de «concientizar a la población, informar sobre medidas preventivas y realizar acciones de descacharreo para la eliminación de criaderos del mosquito transmisor del dengue», en el marco de las Prácticas de Extensión “Estrategia de Intervención Comunitaria en Salud Pública: Prevención del Dengue en la ciudad de Luján”, el pasado miércoles 20, con estudiantes de la asignatura de Salud Pública II del primer año de la Licenciatura.
Las y los estudiantes fueron acompañados por docentes de la asignatura y promotores de salud del municipio, y se organizaron en grupos para maximizar el alcance y efectividad del trabajo. Cada grupo trabajó directamente con la comunidad, proporcionando información clara y accesible sobre las principales medidas para prevenir el dengue, tales como la importancia de evitar la acumulación de agua en recipientes, conocimiento en general sobre la enfermedad y su agente transmisor, e información sobre los síntomas. Además se efectuaron tareas de descacharreo en espacios identificados como áreas de riesgo.
Se realizaron breves encuestas anónimas a vecinos con preguntas preestablecidas. Estas encuestas servirán a los estudiantes como insumo para el desarrollo de un trabajo práctico relacionado con temas fundamentales de la asignatura de Salud Pública II, como epidemiología y planificación en salud. «Este componente permite vincular el trabajo de campo con los contenidos académicos abordados desde la carrera», informaron los responsables de la Licenciatura.
Esta actividad «forma parte de un proyecto más amplio que busca que los estudiantes de enfermería puedan desarrollar habilidades clave para diseñar y llevar a cabo campañas de prevención, abordando la salud pública de una manera integral», señalaron. Agregaron, además, que estas prácticas fortalecen «el vínculo entre la Universidad y la comunidad, trabajando juntos para encontrar soluciones sostenibles a los problemas de salud que nos afectan a todos».