La ermita de la Virgen de Luján, que se encuentra en la fachada de la parroquia y santuario de Santa Lucía, en el porteño barrio de Barracas, fue vandalizada en la madrugada del 6 de enero. El vidrio que protegía la histórica imagen amaneció destrozado, aunque la pequeña talla no sufrió daños.
En declaraciones a AICA, el presbítero José Luis Lozzia, párroco del santuario en Barracas, relató: “El día de los Reyes Magos, 6 de enero, cuando abro la Iglesia 7.30 de la mañana (la misa es a las 8, todos los días) me encuentro con un hombre que estaba en la puerta, que me dice que rompieron el vidrio. Me asomo y era el vidrio de la Virgencita de Luján”.
“Es un vidrio bastante fuerte, tipo blíndex, que para romperlo tuvieron que darle unos cascotazos durante bastante tiempo y bastante fuertes”, destacó el sacerdote.
“A la Virgen no le pasó nada. No sabemos si fue vandalismo, atentado contra la religión o intento de robo de la Virgen. Fue un golpe feo”, añadió, y explicó que, ahora, la imagen de la Virgen se encuentra guardada dentro del templo.
“La idea es reconstruir todo, que la imagen vuelva a su lugar en la calle”, señaló, y aseguró: “Estamos en campaña para poder arreglar esto cuanto antes y que la Virgen vuelva a su lugar”, pero indicó que, para eso, “hay que hacer este trabajo de vidrio reforzado, anti-vandálico; no sé bien cómo vamos a hacer. Tiene su costo y lleva su tiempo”.
“Más allá de preguntarse por qué y lamentarse, también creo que es una invitación a reforzar nuestra fe y nuestra adhesión a Cristo y a su Iglesia, y a estar en paz con esta pertenencia. Pase lo que pase, venga lo que venga, estamos en paz con nuestra madre la Virgen, con nuestra fe, con nuestra parroquia de Santa Lucía, con nuestra Iglesia”, concluyó.