El Canario se salvó del descenso. Santamarina de Tandil que perdió ante All Boys por 1 a 0 en la tarde de este lunes así lo confirmó. Es que el equipo de Tandil y Sacachispas quedaron hundidos en la zona más baja de la tabla y de esta manera serían los dos equipos que jugarán en la B Metropolitana en la próxima temporada. Sin embargo este martes Flandria recibe a las 15:30 a Tristán Suárez en el Estadio Carlos V, ya sin la presión de «ganar o ganar», aunque los tres puntos no vendrían nada mal para mejorar la performance canaria en el certamen.
¡Pare de sufrir! fue una frase que popularizó un pastor brasileño por televisión. Y fue lo que le sucedió al pueblo canario este lunes cuando en un partido trabadísimo All Boys de Floresta le ganó por la mínima diferencia con un gol de Bianchi (Vaya casualidad el apellido) a Santamarina de Tandil, junto con Sacachispas los equipos que según la matemática disputarán la próxima temporada en la categoría B Metropolitana, la tercera del fútbol argentino.
Flandria esta vez se salvó por los resultados ajenos, más allá de su intermitente performance en este torneo de la Primera B Nacional que incluyó un cambio de técnico, la ida de jugadores importantes pero, sin embargo, un apoyo irrestricto de su hinchada, un pueblo detrás de los colores negro y amarrillo cargados de historia por ser los de Villa Flandria y antes los de la Casa Hasburgo a la que perteneció Carlos V que nació en el mismo pueblo que Don Julio Steverlynck y por eso en homenaje a ese hecho el estadio canario lleva su nombre.
Restan para Flandria dos partidos: Este martes a las 15:30 recibirá a Tristán Suárez en su casa y en la fecha 37 viajará al «Jardín de la República» para visitar a San Martín de Tucumán. jugará ambos cotejos sin la presión de estar disputando la permanencia en la categoría, aunque sería extraordinario que obtenga los ansiados seis puntos para que su desempeño sea al menos un poco mejor que el registrado hasta ahora.
Sin embargo el Club sigue viviendo un gran momento institucional: Con obras en marcha, muchas terminadas con una sede impecable y un campo deportivo y estadio que son la envidia de muchas instituciones de la categoría. Cuando se vive un gran momento institucional, los buenos resultados deportivos suelen venir solos.