En la Biblioteca Popular Obrera Jean Jaurès las Licenciadas en Nutrición Sofia Palotti y María Basso brindaron una charla especial de nutrición a personas mayores en el espacio de actividad física y cognitiva. «Un estilo de vida saludable es aquel que nos ayuda a mantener un peso adecuado y vivir con más energía. Es fundamental que el momento de las comidas sea agradable y tranquilo, sumar al menos 30 minutos diarios de actividad física e incorporar alimentos de todos los grupos», recomendaron Palotti y Basso. Lee las recomendaciones de las profesionales:
Una alimentación saludable, un peso adecuado y una vida activa ayudan a prevenir el desarrollo de enfermedades crónicas no trasmisibles tales como: obesidad, diabetes, hipertensión, etc. Para ello es importante:
-Frutas y verduras:
Consumir al menos 5 porciones. Este grupo alimentario es fuente de vitaminas, minerales, fibra y agua. Es fundamental lavarlas siempre con abundante cantidad de agua potable y consumirlas, aquellas que lo permiten, con cáscara. Tener en cuenta que las de estación son más accesibles y de mejor calidad.
-Cereales preferentemente integrales, legumbres, papa, pan y pastas:
Incorporar 4 porciones diarias. Este grupo se caracteriza por ser fuente de hidratos de carbono, fibra (cereales integrales y legumbres) y vitaminas del complejo B. En algunas comidas pueden reemplazar a las carnes. Para un mayor aporte de vitaminas y minerales, se recomienda lavar bien las papas y batatas y cocinarlas con cáscara.
– Leche, yogur y quesos descremados:
Agregar a nuestra alimentación diaria 3 porciones. De esta manera, estaremos incorporando un menor porcentaje de grasa. Los nutrientes que principalmente aportan son calcio, proteínas, vitaminas A y D. Al comprar, mirar la fecha de vencimiento y elegirlos al final para mantener la cadena de frío. El consumo de alimentos ricos en calcio es recomendado para todas las etapas de la vida.
– Carnes y huevos:
Es saludable consumir 1 porción diaria, aumentar el consumo de pescados e incorporar huevo. Son alimentos fuente de hierro y proteínas de buena calidad. Con respecto a su cocción, es importante retirar la grasa visible y la piel de pollo antes de cocinar. Cocinar las carnes hasta que no queden partes rojas o rosadas en su interior previene enfermedades transmitidas por los alimentos. Es recomendable incorporarlas con la siguiente frecuencia:
-Pescado: 2 o más veces por semana
-Pollo: 2 veces por semana
-Vaca, Cerdo: hasta 3 veces por semana
Aceites, frutas secas y semillas:
Fuente principal de vitamina E, antioxidantes y grasas de buena calidad. Se recomienda consumir 2 porciones al día y al menos 1 ve por semana incluir 1 puñado de frutos secos sin salar (maní, nueces, almendras, castañas, etc.) o 1 cucharada de semillas sin salar) chía, lino, girasol, etc). En lo posible, alternar aceites como girasol, oliva, maíz, canola, soja y evitarlos para cocinar.
– Alimentos de consumo opcional:
Se caracterizan por tener un elevado contenido de azúcar, grasas, sal, aditivos, conservantes y estabilizantes. Su consumo debe ser moderado ya que, en exceso, aumentan el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, diabetes, hipertensión, obesidad, etc. Es preferible consumirlos en pequeñas porciones y/o individuales. Dentro de este grupo podemos encontrar a los productos de panadería, gaseosas, jugo, aguas saborizadas, productos de copetín, golosinas, fiambres, embutidos, crema, manteca, margarina, etc.
-Sal y alimentos con elevado contenido de sodio:
Contribuye a un estilo de vida saludable no cocinar con sal, evitar el salero en la mesa y limitar el agregado en las comidas. Es preferible utilizar otros condimentos como orégano, pimienta, nuez moscada, ajo, perejil, etc. Dentro de los alimentos con elevado contenido de sodio, podemos nombrar a las conservas, fiambres y embutidos, enlatados, sopas y caldos deshidratados.
-Agua: se recomienda consumir 2 litros por día y no esperar a tener sed para ingerirla. Para cocinar y lavar los alimentos, el agua deber ser potable.
-Bebidas alcohólicas: el consumo de este grupo debe ser moderado y se debe evitar al conducir.
Un estilo de vida saludable es aquel que nos ayuda a mantener un peso adecuado y vivir con más energía. Es fundamental que el momento de las comidas sea agradable y tranquilo, sumar al menos 30 minutos diarios de actividad física e incorporar alimentos de todos los grupos.