CRA y Carbap expresaron su preocupación por el no otorgamiento de créditos subsidiados al 24% a productores que retengan más del 5% de su cosecha de soja y/o trigo.
“Las pymes agropecuarias que pretendan aspirar a un crédito a dicha tasa deben vender casi la totalidad de su cosecha de trigo y/o soja, y no mantener granos almacenados en acopios o silos bolsa. Y en el caso de las compañías grandes, las que no hayan comercializado el 95% de su cosecha, se les incrementará la exigencia de capital mínimo por riesgo de crédito de toda financiación”, analizó la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa.
Para la entidad, se trata de una medida “disparatada”, que en plena siembra de trigo, trae a la memoria del productor “medidas similares tomadas en 2014 y con pésimos resultados para el país”. “¿Acaso el Gobierno Nacional piensa que la normalización del país post pandemia se podrá realizar sin tener en pleno funcionamiento y con la necesaria financiación al sector que más divisas entrega a las arcas del Estado?”, disparó.
Confederaciones Rurales Argentinas por su parte, consideró que con esta medida, el campo “se pone en sus espaldas una vez más a la Argentina“.
En un repaso por las últimas noticias del sector, CRA recordó que desde el Gobierno se habló de la posibilidad de falta de trigo en diciembre, y hubo versiones de que en enero habrá que cerrar la exportación de carne, así como también circuló el retorno de un proyecto de Junta Nacional de Granos, además de las idas y vueltas con el Mercosur. “Una tras otra, la cadena de desaciertos, yerros y errores de diagnósticos, sea por falta de conocimientos del sector, por idoneidad o por intencionalidad, se van acumulando uno tras otro sumando incertidumbre al único sector activo de la economía“, analizó.
“El propio Ministerio de Agricultura de la Nación indica que la liquidación de cereales y oleaginosas en su comparativa interanual rubrica una brecha positiva de diez puntos (48% vs 38% del año anterior), que ya se liquidó, anticipadamente una proporción grande de la cosecha; y es que el campo responde con intención de siembra, con cosecha y con recursos, manteniendo vivo el pujante corazón de nuestro interior productivo. Basta solo andar por las rutas de nuestro país para ver camiones, cosechadoras, tolvas y todo el andamiaje productivo del sector en movimiento”, destacó la entidad.
En tanto, se quejó de que se cortó el crédito pero apareció un DIVA (depósito de interés variable), un “Plazo Fijo a Valor Producto”, y simultáneamente, aseguró que llegan comunicaciones de corredores y exportadores “solicitando la pesificación inmediata de los contratos de venta de cereales y oleaginosas”.