Para asegurar el abastecimiento de efectivo, cada entidad deberá responsabilizarse por los cajeros de sus sucursales y las transportadoras de caudales lo harán con aquellos cajeros ubicados fuera de ellas.
Las sucursales bancarias no abrirán al público durante toda la cuarentena pero se mantendrán activos los cajeros automáticos y la banca electrónica para poder operar a través de home banking, según las determinaciones que se apresta a tomar el Poder Ejecutivo para establecer una cuarentena total en todo el país para reducir los contagios del coronavirus.
El Directorio del Banco Central de la República Argentina (BCRA) estableció declarar “días inhábiles” del 16 al 31 de marzo del 2020 para las actuaciones cambiarias y financieras en el marco del fuero Penal Cambiario, “sin perjuicio de la validez de los actos procesales que se cumplan en dicho período por no ser necesaria en ellos la intervención de los encausados”, según explicó el organismo a través de un comunicado.
El gremio bancario ratificó que «no habrá atención al público» en las entidades financieras hasta el próximo martes 31 de marzo, cumpliendo con el «aislamiento social, preventivo y obligatorio» dispuesto por el Gobierno. «En comunicación con el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, hemos confirmado que la única excepción será una dotación mínima necesaria para garantizar la atención de operaciones electrónicas y abastecimiento de cajeros automáticos, según se comunicará por las entidades», señaló La Bancaria.
De ese modo, en un comunicado difundido tras el anuncio del presidente Alberto Fernández respecto del coronavirus, subrayó que «no habrá atención al público». De ese modo, el gremio encabezado por Sergio Palazzo dejó en claro que las persianas de las entidades estarán cerradas mientras dure la cuarentena, y el propio líder sindical lo explicitó también en sus redes sociales.