«En momentos muy difíciles y delicados para la vida de nuestro país y de sus habitantes, en los que las consecuencias de graves desmanejos del pasado y renovados episodios de una traumática economía nacional y mundial se suceden, distorsionan las relaciones de precios, se suman a anteriores inclemencias climáticas, y generan graves perjuicios a los tambos y a todas las familias que directa o indirectamente están comprometidas con esta actividad; queremos expresar nuestra solidaridad con todos ellos, de los que somos una parte indisoluble», comunicaron desde La Cámara de Productores de Leche de la Cuenca Oeste de Buenos Aires.
«Aceptamos el desafío de la competitividad, que es nuestra fuente última de sustentabilidad, y palanca del crecimiento y el desarrollo. De diferentes maneras, en esa búsqueda estamos los productores en las distintas regiones, de todas las escalas y niveles de eficiencia. Pero señalamos que esto requiere de un adecuado financiamiento y condiciones básicas para estimular o justificar las inversiones imprescindibles. Necesitamos bajar costos y subir el precio de nuestro producto, y en el contexto actual, no parecen cosas fáciles de alcanzar en forma inmediata», dijeron desde la cámara de productores.
Finalizando el comunicado dieron a conocer las metas «definidas: a) Para el corto plazo: tratar de incidir en las variables a nuestro alcance para obtener el plano más alto posible en la banda de precios de la leche de tambo. Y b) Para lo estratégico del mediano y largo plazo: aportar propuestas concretas para el reordenamiento institucional de nuestra lechería, sin el cual será imposible crecer y desarrollarnos con todo nuestro potencial, ni poder enfrentar con más fortaleza cada nueva crisis que se nos presente».