La Legislatura bonaerense eliminó una contribución del 6 por ciento en las tarifas de luz y del 4 por ciento en las de agua y cloacas, que estaban incluidas en las facturas de esos servicios y eran destinadas a los 135 municipios de la provincia, aunque habilitó a las comunas a cobrarle una tasa a las empresas prestatarias de esos servicios.
El proyecto, enviado por la gobernadora María Eugenia Vidal y aprobado en el Senado, reducía la contribución al 0,01 por ciento con lo que vedaba la posibilidad de que los municipios pudieran aplicar una tasa.
Por eso el proyecto aprobado establece en el 0% la contribución que los agentes de la actividad eléctrica abonan mensualmente a las municipalidades por las operaciones de venta con usuarios o consumidores finales.
La iniciativa contempla ahora que “cada municipio podrá aplicar a la distribuidora correspondiente todo gravamen o derecho municipal que corresponda, los que en total no podrán exceder 6% de las entradas brutas de la distribuidora, netas de impuestos, recaudadas por la venta de energía eléctrica -con excepción de las correspondientes por suministros para alumbrado público”.
El mismo esquema utiliza para el 4% que las comunas percibían de los servicios de agua y cloacas prevista en la Ley 13.404 al otorgar a los municipios la potestad de cobrarle tasa a las prestadoras hasta ese tope.
La gobernadora -vía decreto- eliminó de las tarifas de luz un 15,5% de dos fondos específicos que recaudaba la provincia; un 6% de la tarifa de gas y otro 3% de la tarifa de agua pero también impulsó que se eliminen las contribuciones que perciben los municipios.
La ley fue acompañada por el oficialismo de Cambiemos y las bancadas del Frente Renovador y del PJ Unidad y Renovación, mientras que Unidad Ciudadana votó en contra.