El espacio, que proyecta contar con dos canchas, un SUM multiusos, guardería, utilería, enfermería, cocina y vestuarios completos, además busca ser un lugar de escucha y contención de pibes y pibas del barrio. El proyecto está con un avance del 60 por ciento y necesita la ayuda del municipio, para finalizarlo.
Al fondo del barrio San Fermín, donde alguna vez hubo familias relocalizadas a la vera del Río Luján, hoy se levanta el Club Deportivo Los Santos. Este ambicioso proyecto del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) junto con las vecinas del barrio, que ya lleva un 60% de avance, está a punto de convertirse en el gran centro de contención deportiva y social que el barrio necesita.
A pesar del avanzado progreso en la estructura, el club no puede utilizarse sin elementos esenciales: la tierra necesaria para nivelar las canchas, la colocación del alambrado perimetral y las conexiones esenciales de tendido eléctrico y agua. «Necesitamos que el municipio nos dé una mano para garantizar la continuidad de las obras», remarcaron desde el MTE.
El Club Deportivo Los Santos es una inversión para el futuro de los pibes y pibas de los barrios populares de Luján y un ejemplo de organización comunitaria, que solo necesita el apoyo institucional para ser una realidad.
La historia del Club Deportivo Los Santos es la historia de la perseverancia de la comunidad, que entre otras integra Norma Catalán, más conocida como Yeyi. Hace casi nueve años, un 26 de noviembre de 2016, «Yeyi», referenta del barrio San Jorge y miembro de nuestro movimiento, comenzó con prácticas de fútbol femenino en la plaza del barrio.
Lo que empezó como una escuelita de verano se convirtió rápidamente en un proyecto que convocó a la comunidad. «No teníamos dimensión de que esta propuesta le iba a interesar tanto al barrio», recuerda Yeyi. Pronto, más de 70 niñas se sumaron a la Escuelita de Fútbol Femenino San Jorge, encontrando en el deporte no solo una actividad, sino un espacio de contención, escucha y merienda.
Con el tiempo, el espacio de la plaza quedó pequeño, y el interés creció sumando a más de 150 pibes y pibas y hasta un equipo de madres en primera. «Nuestro sueño fue siempre tener una cancha donde podamos sostener a todos estos niños y niñas», afirma Yeyi, motorizando la idea de un lugar propio para garantizar condiciones óptimas y la continuidad del proyecto.
El Club Deportivo Los Santos está proyectado para ser mucho más que canchas. Contará con dos campos de juego (cancha de 7 y de 11), un SUM multiusos, guardería, utilería, enfermería, cocina, y vestuarios completos. Este conjunto de infraestructura está pensado para ofrecer a la comunidad un lugar de referencia fundamental.
«Estos espacios le dan contención a esos pibes y pibas que no tienen la posibilidad de pagar una cuota,» explica Catalán, destacando el espíritu inclusivo y gratuito del club. Su visión es clara: transformar la dura realidad del barrio. En un contexto donde «los barrios están siendo
azotados por lo que es el narcomenudeo», el club es un pilar esencial. «Hoy estamos perdiendo a las pibas y los pibes», lamenta Yeyi.
El proyecto del MTE se enfoca en sacar a los jóvenes del consumo problemático, ofreciendo una alternativa digna: contención deportiva, moral y un acompañamiento integral a las familias. El Club Deportivo Los Santos es el «frente de los barrios populares,» cambiando la imagen de una zona históricamente afectada por las inundaciones y brindando una nueva calidad de vida a los vecinos.
Actualmente, la rama de construcción del MTE ejecuta la obra, que originalmente contaba con financiamiento del Fondo de Integración Socio Urbana (FISU), un fideicomiso clave para urbanizar barrios populares. Sin embargo, la reciente eliminación de este fondo por decreto del Gobierno Nacional ha paralizado la financiación, dejando la finalización de la obra en un incierto.