Está en el parque industrial de la localidad, propiedad de Inversora Cortines. Demandó una inversión de $30 millones y, al comienzo, producirá 40.000 piezas al mes. La nueva planta producirá quesos untables, estacionados, fermentados, camembert, brie, y en barra.
La primera fábrica de América Latina para la producción de quesos 100% a base de plantas comenzó a operar en el parque industrial de Cortínez. El emprendimiento se hizo realidad tras una inversión de unos 30 millones pesos. Se informó que en esta primera etapa, la planta producirá unos 40.000 quesos mensuales con una proyección de crecimiento de un 70% sólo en su primer año.
La fabrica pertenece a Villa Flandria Vegan Foods, una nueva compañía que se dedicará a la producción de quesos de los tipos untables, estacionados, fermentados, camembert, brie, y en barra que serán elaborados enteramente a base de plantas: sin lactosa, sin TACC (trigo, avena, cebada y centeno) y aptos para quienes padecen APLV (alergia a la proteína de leche de vaca).
La fábrica, que es la primera en su tipo tanto en el país como en América Latina tiene como objetivo ofrecer una alternativa al sistema de producción de alimentos vigente. En una primera etapa, la producción de quesos está comprometida a dos marcas de productos veganos que saldrán al mercado próximamente. Ya en la segunda etapa se buscará producir una marca blanca que pueda estar en los hipermercados; así como también se prevé el desarrollo de otras plantas productoras en otros países de la región.
Según datos recientes, en la Argentina, un 12% de los mayores de 18 años son vegetarianos o veganos. En tanto, otro 12% de la población se definió como «flexitariano», que son aquellos que buscan reducir el consumo de proteínas animales, pero sin eliminarla del todo.
En sus diferentes variantes, se trata de un mercado que está claramente en alza. El de los flexitarianos creció tres puntos porcentuales entre 2019 y 2020, mientras que en los últimos cinco años, el número de negocios vegetarianos o veganos se ha duplicado.
En la proyección, se estima que para el 2023 el negocio global de alimentos sustitutos de las proteínas animales (carne, leche y huevo) superará los 7.000 millones de dólares y solo en Europa la demanda de proteínas vegetales se incrementará un 57% en tan solo dos años.
Por el tipo de alimentación y de costumbres, se espera que América Latina imite esta tendencia alcanzando un crecimiento asegurado de dos dígitos, aunque el impacto seguramente sea menor.
Las proyecciones indican que para 2030, el 13% del consumo global de carnes será reemplazado por productos sustitutos.