Pese a distintas campañas que solicitaban restringir el uso de cohetería sonora, en algunos barrios urbanos de Luján perros, personas con Trastorno del Espectro Autista, adultos mayores y niños sufrieron por la falta de empatía de muchos que usaron petardos, bombas y otros elementos que más que reflejar un clima festivo, asemejan la situación a un conflicto bélico.
En los últimos minutos del 24 de diciembre y los primeros del 25, muchas zonas de Luján volvieron a usar pirotecnia sonora que causa graves perjuicios a mascotas, personas con autismo, adultos mayores, y otros grupos de personas. Si bien en barrios más alejados del centro y en localidades el uso fue menor (y en lugares como FoNaVi, Loreto, Flandria Sur, Arroyo Dulce, Centro, Juan XXIII, Sarmiento o Cortinez casi nulo) en otros los vecinos hicieron caso omiso a las campañas efectuadas por protectoras de animales y el mismo municipio semanas antes de las fiestas bajo el slogan “Más Luces y Menos Ruido”.
La información sobre el uso de pirotecnia en esta Navidad se desprende de datos recabados en un relevamiento que hizo TRIBUNA DEL PUEBLO a través de las redes sociales de Facebook y Twitter.
Por caso, una usuaria manifestó que en la “zona de la terminal (el uso fue) apenas minutos y poco”. En tanto Veronica una vecina de Arroyo Dulce contó que en ese barrio el uso fue “casi cero pirotecnia”.
Otro de los vecinos que participó del relevamiento, Gonzalo del barrio Santa Elena, dijo que allí “del 1 al 10, un 7. Casi se me muere el perro. No se q esperan para prohibirla (a la pirotecnia). Del mismo barrio, Gladys, pintó el mismo panorama: “la verdad tristísimo ver que la gente no entienda nada en el quinto fue un desastre no paraban de tirar pirotecnia cenamos en el patio teníamos que estar cuidándonos que no caiga nada ni hablar de nuestros perritos se les dio las gotitas pero igual tuvimos que estar con ellos por que se asustaban mucho no saben lo que sufren los perritos”.
En otro barrios, como se dijo el nivel de pirotecnia fue bajo: “en San Cayetano muy poco”, manifestó Gladys ante la consulta de este medio. Lo mismo en el Fo.Na.Vi como nos contara Natalia de ese barrio.
En Hostería Norte, Lilina compartió con TRIBUNA DEL PUEBLO sus sensaciones: “demasiada pirotecnia y desde temprano”. “Barrio Mirador y Juan XXIII poca pirotecnia., en comparación con otros años. Igualmente en barrio Elli muy poca”, nos comentó María.
“Barrio Esperanza/zapiola mas que el año pasado. En una época tan difícil con Pandemia; con una situación económica frágil donde muchas familias la pasan mal, donde se trata de concientizar el daño que produce en animales y personas, sigue habiendo gente inconsciente festejando con tremenda boludez, LA PIROTECNIA”, se quejó Ezequiel.
“Barrio Villa del Parque mucha pirotecnia”, compartió Gonzalo. “Sarmiento poco”, agregó Javier. “Pueblo Nuevo poco por suerte”, graficó Patricia. “En Casuarinas, menos que otros años y concentrada a la medianoche, pero igual bastante”, aportó Jimena.
En tanto Carlos contó que en el “Barrio Zapiola cerca de Parque Esperanza mucho ruido. Mis perros muy afectados. Temblaron hasta los vidrios”. Nora, otra vecina del Zapiiola agregó que “Mal muy mal…no solo por mis perros, sino por un vecino que lo pasa muy mal …pero a esta gente no le importa y todos los años lo mismo”.
Una vecina de la calle Mariano Moreno casi Alberti, destacó que “tiraron hasta bombas y los cuetes en la puerta de mi casa lo que pasa que si los denunciaba después soy una mala vecina pero tenemos la policía a una cuadra pero no escuche que pasaran haciendo la como dijeron que lo iban hacer esperemos que el 31 no pase otra vez”.
Por caso en el Centro, Mitre al 1100, Griselda contó que “apenas…consideramos….uno o dos INADAPTADOS». Y Ximena contó que en el barrio San Bernardo (hubo) bastante, mi sobrino, 7 años, que es autista terminó con una crisis”.
“En Rawson y Dr. Real se escuchó bastante aunque menos que en 2019”, agregó Teresa. “Jauregui nada”, graficó Diego. “San Cayetano mucha pirotecnia”, contó Enrique.
Dispar la reacción de los vecinos de todo Luján ante las campañas de concientización. Como todo cambio de paradigma llevará tiempo aunque ese tiempo signifique sufrimiento para aquellos que padecen los males que acarrea el uso indebido de la pirotecnia. Mientras tanto seguirán los pedidos para que en año nuevo el uso de cohetes explosivos sea menor, como por ejemplo lo viene haciendo el “Círculo Amigos del Animal Callejero – Manos x Patas”. Ojalá les den bolilla.