Fernando Casset, concejal referente de Juntos por el Cambio y Alejandro Demares de Confienza Pública propusieron «para salir de la crisis generada por la pandemia por el nuevo coronavirus COVID-19, un espacio en el que se encuentren todos los sectores de la vida social y económica del Municipio para hacer visibles sus problemáticas; y se vayan trazando estrategias para el presente y el futuro de cada sector».
Comunicado:
Luján necesita recuperarse del tremendo impacto que tiene esta emergencia sobre nuestra economía, que sobre todo sufren los que menos tienen: los cuentapropistas, los trabajadores informales, el sector turístico, los profesionales, los comerciantes y la clase media que depende de los ingresos que genera día a día.
Ya aprendimos a cuidarnos, y es hora que con todos los cuidados definamos los protocolos para poder reestablecer cada actividad, sobre todo las que tiene mayor e inmediato impacto.
Ese espacio también nos debe permitir desarrollar las estrategias necesarias para poder cerrar la brecha digital que la cuarentena expuso, especialmente en el sector educativo. Debemos garantizar a los alumnos y docentes el acceso a los dispositivos digitales, la conectividad y los paquetes de datos que hagan posible el desarrollo de sus actividades en este nuevo contexto.
Por ello proponemos la creación de ese ámbito que genere actividades de investigación, divulgación y de formulación de propuestas concretas que luego puedan ser debatidas y decididas en el Concejo Deliberante o en Departamento Ejecutivo, según corresponda. Debe ser un espacio plural, en el que confluyan los intereses de todos los sectores sociales del Municipio y se logren acuerdos que mejoren la calidad de vida de los lujanenses.
En especial, proponemos que en esa discusión de definan los siguientes protocolos para la apertura de actividades:
Económico: el día después de la cuarentena es hoy y ya se debe establecer un plan estratégico para reestablecer el entramado productivo de la región.
Digital: el impacto de la emergencia en la educación y en la economía, en el desarrollo de nuevos empleos y en la reconversión de los circuitos comerciales.
Jóvenes: como los activos protagonistas en el cierre de la brecha digital entre generaciones.
Tercera edad: establecer un protocolo de colaboración con una de las franjas etarias más vulnerable al COVID-19.
Medio ambiente: aprovechar los nuevos comportamientos sociales para diseñar e implementar estrategias de preservación y recuperación de nuestro hábitat, fomentando las conductas saludables y de menor impacto ambiental.
Alejandro Demares y Fernando Casset.