El campo bonaerense podría fijar una fecha concreta para llevar a cabo un cese de comercialización de granos. Mientras se esperan definiciones en torno a un encuentro de la Mesa de Enlace nacional, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) se dispone a avanzar en nuevas protestas, en rechazo al aumento del Inmobiliario Rural, la suba de las retenciones a las exportaciones a nivel nacional y el incremento en las tasas municipales en los distritos de la Provincia.
El presidente de la entidad, Matías De Velazco, anticipó la semana pasada que el sector que nuclea a los productores bonaerenses se encuentra “al borde del cese de comercialización”, como reacción al impacto de medidas de ajuste aplicadas por los distintos niveles de gobierno (nacional, provincial y municipales) y que hoy esa medida podría tener fecha.
Se contextualiza en una serie de caravanas, tractorazos y otras protestas que en distintos puntos de la Provincia se vienen llevando a cabo como respuesta a la reciente aprobación en la Legislatura de la ley Impositiva, que sube el impuesto Inmobiliario Rural entre el 15 y el 75 por ciento, y en los incrementos que en los distintos distritos de la Provincia se aplicaron sobre las tasas municipales y que, según advirtió De Velazco, llegan hasta el 70 por ciento.
Pero, además, el campo bonaerense buscará poner su propio sesgo a la situación entre sus representantes de la Mesa de Enlace y el gobierno nacional, que mantienen en suspenso el diálogo por las retenciones a las exportaciones de granos.
El 23 de diciembre pasado, las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), la Sociedad Rural (SRA), Coninagro y la Federación Agraria (FAA) le pidieron al presidente, Alberto Fernández, que no aplique otro incremento del 3 por ciento a las retenciones a las exportaciones de granos que avaló el Congreso de la Nación, al tiempo que planteó avanzar en el diseño de un esquema que tienda paulatinamente a eliminarlas.
El Presidente aumentó las retenciones del 24,7 al 30 por ciento para la soja, en tanto que para el trigo y el maiz las llevó del 6,7 al 12 por ciento. Ahora la preocupación del campo es que con la ley de Emergencia Fernández tiene la facultad de incrementar otro 3 por ciento esos porcentuales, en caso de resultarle necesario.
Sin embargo, desde la reunión que mantuvieron campo y gobierno hasta ahora no hubo señales que tranquilizaran a ese sector.