En la mañana del sábado 4 de mayo, concluyó la visita ad limina apostolorum para la primera tanda de obispos que viajó a Roma, donde estuvieron presentes Agustín Roberto Radrizzani y Jorge Eduardo Scheinig en representación de Mercedes-Luján. Luego de una semana colmada de reuniones en distintos Dicasterios y Congregaciones, en la Secretaria de Estado de la Santa Sede, y con el papa Francisco, los obispos se preparan para regresar a sus diócesis.
Monseñor Jorge Eduardo Scheinig, obispo auxiliar de Mercedes-Luján, y monseñor Hugo Santiago, obispo de San Nicolás de los Arroyos, compartieron su testimonio. Destacaron la importancia de la visita, de poder escuchar al cardenal Parolín sobre la acción que la Iglesia realiza en los lugares de conflicto, como mediadora de diálogo y para evitar situaciones que pongan en riesgo la vida de las personas.
En este sentido, monseñor Santiago expresó: “En la Secretaría de Estado tratamos temas de suma complejidad, tales como la situación en Venezuela y acontecimientos en Medio Oriente y China. Respecto a la situación en Venezuela, la Iglesia siempre realiza un rol facilitador del diálogo, motivo por el cual no toma parte alguna por las posturas abordadas en el conflicto, aun sabiendo la complejidad de su papel. A mi criterio, la posición adoptada en pos de facilitar el diálogo, me resulta muy inteligente y conciliadora, ya que la intención es acercar posiciones”.
Del mismo modo, respecto a la situación en China, indicó: “Hemos conversado acerca del nombramiento de los obispos, y celebramos el acuerdo alcanzado. Para unificar a la Iglesia de China, abordamos aspectos que hacen al tratamiento de problemas con, a priori, difícil solución. Pero esto es un avance considerado por la Secretaría de Estado, ya que, mediante este acuerdo, resulta posible unificar los nombramientos realizados por el Estado e igualmente los confirmados por el Santo Padre”.
Sobre Medio Oriente, subrayó: “La situación allí es compleja, en especial en Siria, con todo el sufrimiento que significa y magnifica la migración, sumado al interés de las potencias mundiales. En este contexto, dialogamos sobre la realidad en Palestina e Israel, territorios que hoy se encuentran en sensibles relaciones diplomáticas, aún más delicadas por la complejidad de la situación”.