Se detectó el primer caso de hantavirus en la provincia de Buenos Aires, el jovén se encuentra en terapia intensiva en el hospital de Lomas de Zamora. Acerca del origen de la infección, el jefe del Hospital Gandulfo confirmó que el paciente trabajó en la segunda quincena de diciembre en un tambo de San Andrés de Giles. La Secretaria de Salud de Luján comunicó que no emitió hasta el momento ningún comunicado sobre el hantavirus y la aparición de roedores.
Sobre las características de la cepa de hantavirus, se alertó de que se trata del «primer caso registrado» en la provincia de Buenos Aires y que es «autóctono». Se trata de una persona que se encuentra internada en el Hospital Interzonal General de Agudos Luisa Cravenna de Gandulfo, en la localidad de Lomas de Zamora, y evoluciona favorablemente.
La Secretaria de Salud de Luján aclaró «que se desconoce el origen del texto que en estos días circula en redes y chats de whatsapp. Ese comunicado no es oficial. No obstante ello, vale informar que el hantavirus es una enfermedad viral aguda grave transmitida por los ratones silvestres (principalmente los colilargos)». También resaltaron que toda noticia oficial que genere el municipio, se encontrará en la página web www.lujan.gob.ar.
Hantavirus: ¿Cómo puede prevenirse?
– Evitar la convivencia con roedores y el contacto con sus secreciones.
– Evitar que los roedores entren o hagan nidos en las viviendas.
– Si realizan actividades de trekking, usar calzado cerrado y circular solo por sendas habilitadas.
– Tapar orificios en puertas, paredes y cañerías.
– Realizar la limpieza (pisos, paredes, puertas, mesas, cajones y alacenas) con una parte de lavandina cada nueve de agua (dejar 30 minutos y luego enjuagar). Humedecer el piso antes de barrer para no levantar polvo.
– Si vive en zonas rurales, colocar las huertas y almacenar la leña a más de 30 metros de las viviendas, cortar pastos y malezas hasta un radio de 30 metros alrededor del domicilio.
– Ventilar por lo menos 30 minutos antes de entrar a lugares que hayan estado cerrados (viviendas, galpones) y cubrirse la boca y la nariz con un barbijo N95 antes de ingresar.
– Lavarse las manos con agua y jabón al finalizar estas tareas.
– Al acampar, hacerlo lejos de maleza y basurales, no dormir directamente sobre el suelo y consumir agua potable.
– Si se encuentra un roedor vivo: usar veneno para roedores o tramperas para capturarlo (no intentar tocarlo o golpearlo). Consulte en el municipio si se dispone de un servicio de control de plagas.
– Si se encuentra un roedor muerto: rociarlo con lavandina junto con todo lo que haya podido estar en contacto y esperar un mínimo de 30 minutos. Luego recogerlo usando guantes y enterrarlo a más de 30 cm de profundidad o quemarlo.
¿Cuáles son los síntomas?
Se parecen a un estado gripal. Pueden incluir: fiebre, dolores musculares, escalofríos, dolores de cabeza, náuseas, vómitos, dolor abdominal y diarrea. En general no presentan congestión nasal o resfrío. Luego de algunos días puede aparecer dificultad para respirar que puede agravarse produciendo lo que se conoce como «síndrome cardiopulmonar por hantavirus». Se trata de un cuadro grave en el que la persona no puede respirar y comienza con falla cardíaca y presión muy baja. Si la persona no es tratada a tiempo puede generar complicaciones e incluso la muerte.
¿Cómo es el tratamiento?
No existe un tratamiento específico. Las personas con síndrome cardiopulmonar por hantavirus deben ser asistidas en establecimientos hospitalarios, de preferencia con unidades de terapia intensiva que cuenten con asistencia respiratoria mecánica.