En el marco de las actividades organizadas por el Gen Local en conmemoración del Centenario de la Reforma Universitaria, los dirigentes estuvieron en la casa de altos estudios, para exponer sobre el significado y la implicancia de esta gesta histórica en la Educación Superior. La jornada sirvió además, para recordar los 34 años de la reapertura de la UNLu.
Juan Carlos Juárez, referente local del Gen, abrió el acto señalando “Es importante recorrer la historia y detenernos a pensar en el coraje de aquellos jóvenes estudiantes y obreros que con su decisión de no claudicar, pusieron en valor la importancia de la Educación Superior” “Un hecho similar ocurrió acá en Luján, donde con la misma decisión y el mismo temple, hubo un grupo de estudiantes y representantes de la comunidad que se resistieron al cierre de esta universidad” “Fueron momentos muy duros, difíciles, pero ese accionar de voluntades y convicciones sirvieron para hacer visible la injusticia que estaba cometiendo la dictadura militar”.
Sobre este tema, dio testimonio el Ing. Oscar Kise, uno de aquellos estudiantes “Como decía Juan Carlos no fue fácil, nada nos resultó sencillo. Podría contarles muchas vivencias, muchas anécdotas, pero quiero detenerme para resaltar el convencimiento que había y nos impulsaba a la defensa “Estábamos asumiendo riesgos personales, no sabíamos como podía terminar aquel manifiesto. Fueron momentos muy fuertes pero nosotros sólo teníamos como único pensamiento la resistencia y uno de nuestros objetivos era la visibilidad del tema a nivel nacional” “Estoy seguro que lo conseguimos y que sirvió, claro que sirvió”.
Seguidamente hizo uso de la palabra Ricardo Alfonsín quien rescató a la reforma universitaria de 1918 como un antes y un después en la Educación Superior “aquellos estudiantes marcaron el camino, un horizonte”. En su alocución hizo referencia a la situación actual de las universidades, criticó las políticas asumidas por el gobierno en cuanto a educación, reflejadas puntualmente en el presupuesto, sobre algunas manifestaciones públicas de autoridades gubernamentales, habló sobre la importancia del rol del estado y puso énfasis en la autonomía de las universidades. Culminó con una pregunta ¿Qué pensarían, que actitud tendrían aquellos reformistas de 1918 ante este estado de situación?
Margarita Stolbizer fue quien cerró el acto. “Esta casa de altos estudios nos resulta familiar ya que hemos estado varias veces. Por ello, en el recorrido que estamos haciendo por varias universidades en el marco del centenario de la Reforma Universitaria, no podíamos dejar de venir, porque además nos resultó apropiado vincular aquel hecho histórico con los 34 años de la reapertura de esta universidad” “Honrar la reforma universitaria incluye el esfuerzo por actualizarla. Esa rebelión reformista marcó una ruptura con el elitismo dominante de la época y el nacimiento de la Universidad autónoma y democrática. La Universidad pública pasó a ser plural, gratuita y gobernada. Permitió pensar en un país con mejores oportunidades en el desarrollo para todos. Los jóvenes reformistas lucharon por la libertad de cátedra, la asistencia libre, la periodicidad de la cátedra, el libre ejercicio de la democracia, los concursos para la distribución de cargos, la publicidad de los actos universitarios, formas de enseñanza donde los jóvenes podían participar propositivamente y la relación obrero estudiantes. Los jóvenes reformistas planteaban la solidaridad con el movimiento obrero y compartían sus preocupaciones y la visión basada en una universidad de puertas abiertas a la sociedad y a los ciudadanos”.