Lo realizó «con el objetivo de llevar ‘tranquilidad a los vecinos’ y ‘despejar mitos respecto de su funcionamiento en general’, en especial sobre uso del agua, emisiones y sonidos, entre otros puntos importantes», destacaron.
Con el mensaje de que “la generación de energía es una necesidad del país y la única manera de progresar”, la empresa brindó información presentada en tres ejes temáticos.
En el primero, “tecnología aplicada”, despeja dudas del tipo de tecnología que se va a usar, “que no es obsoleta”, y que es la que actualmente “utilizan los países desarrollados”. También, en el mismo apartado, hace mención sobre el sonido de las turbinas, desmitificando que producen un “ruido ensordecedor”. Resalta que un directivo de la empresa, realizó una entrevista para un medio local en la planta de Araucaria en San Pedro, a metros de las turbinas en pleno funcionamiento, lo cual fue absolutamente posible.
El segundo tópico, “salud e impacto ambiental”, subraya que las turbinas no generan humo ni fuego, y que las emisiones se basan en parámetros internacionales, además de los locales que son menos exigentes.
Respecto del uso del agua, asegura que la planta demandará el equivalente al 10% del consumo para el riego de una cancha de golf, sin comprometer de ninguna manera el recurso hídrico. Por último, da cuenta que al agua que se verterá, “no se le agregará temperatura”, y “será en condiciones similares o mejores a la que se extrae”.
En el apartado “operaciones”, el tercer eje temático, la empresa describe su lugar de emplazamiento, en la intersección de las rutas 6 y 34, por donde transita gran cantidad de autos y camiones con carga, en un área a metros de la cervecera CCU, y mayormente “despoblada”.
Como último punto, en cuanto al riesgo de explosión, destaca que la planta “cumple con estándares de calidad internacional en cuanto a seguridad, monitoreo y plan de contingencias ambientales”, y con “un sistema anti derrame”, para cubrir cualquier posibilidad de derrame.