Se comprobó al realizar las pruebas de resistencia de la obra realizada la semana pasada. Algunas locomotoras pasan pero muy ajustadas, los vagones no pueden hacerlo. Hubo desconcierto en los funcionarios de Vialidad Nacional y personal de la constructora. En esta nota toda la información.
Desde el viernes de la semana pasada, todas las miradas sobre la obra de la Autopista 5, estaban puestas en el reemplazo de las vías del tren por el paso del by pass de conexión con el Acceso Oeste. Por eso, el servicio ferroviario estuvo suspendido. Y parece que seguirá así.
El fin de semana pasado el director de Vialidad Nacional, Javier Iguacel, detalló que, el sábado, se colocaron las tres vigas de apoyo y se montaron dos de los cuatro puentes. Los otros dos restantes llegaron el domingo. “El puente del by pass a Luján está montado en su totalidad. Esto me emociona”, había declarado en su momento el funcionario. Los puentes de hierro fueron construidos en el Astillero Storni, en la Ciudad de Buenos Aires, con “la tecnología de los submarinos”, había informado Vialidad Nacional.
Todo era alegría hasta que hubo que probar la resistencia de los puentes ante el paso de las formaciones ferroviarias: Y allí surgió el problema.
En diálogo con TRIBUNA DEL PUEBLO Diego Hormachea, trabajador desde hace muchos años del Ferrocarril y directivo de la Seccional Oeste de la Unión Ferroviaria contó lo que sucedió al momento de efectuar las pruebas: “Es un papelón en una mega obra te equivocaste en un puente”, comenzó y continuó: “Hay varias cosas. Al puente lo mandaron a hacer a un astillero y hubo varios errores. Uno de ellos es la medida. El otro error es que los puentes están con terminaciones rectas y el puente es respecto de la autovía de orientación oblicua. Tuvieron que hacer varios cambios”.
Y señaló que cuando hicieron las pruebas sobre los nuevos cruces ferroviarios “probaron las máquinas (locomotoras) y pasaban muy ‘finitas’ (ajustadas), pero los vagones no pasaban”. Si bien hay nuevos vagones de las formaciones puestas en marcha en 2014 y 2015 que serían más angostos “estarían pasando pero muy ajustados. Golpean contra las barandas”, destacó Hormaechea. “Es un peligro”, opinó.
El dirigente y trabajador ferroviario contó a este medio que “se suponía que el sábado (por este 25 de noviembre) íbamos a tener servicios nuevamente, primero con algunos y desde el lunes (27 de noviembre) con normalidad, ahora parece que la restricción entre General Rodríguez y Mercedes continuará una semana más”.
“El viernes estaban desesperados, querían hacer la foto, estaban todos para eso y se encontraron con que los trenes no pasaban por el puente. Estaban desesperados buscando una solución. Al parecer van a retirar un poco hacia afuera las barandas, o cortarlas para ganar espacio. Lo que pasa es que la baranda no es un adorno, es un refuerzo de la estructura. Hay que tener cuidado con lo que se haga”, analizó.
Por último Hormaechea contó a TRIBUNA DEL PUEBLO otra información: “La planimetría de los coches, depende de infraestructura de la empresa de trenes. Acá se ha hablado como amigos, son los dos afines al gobierno (la empresa de trenes y la encargada de los puentes). A la constructora nunca le pasaron los planos de los vagones del tren. Se manejaron con planimetría anterior. Es un escándalo”, sentenció.