Néstor Fabián Migueliz es abogado, fue dirigente de la juventud Radical desde 1989 hasta 1993 del distrito de Luján, secretario de la Acción Política del comité local de 2010 hasta 2012, presidente del comité local en 2012, y actual vicepresidente electo del centenario partido. Es, además, director de capacitación parlamentaria del Honorable Senado de la Nación.
Una entrevista de Leonel Blasco
En diálogo con TRIBUNA DEL PUEBLO, repasa los aspectos más importantes de su visión sobre la alianza “Cambiemos” a nivel nacional, provincial y local, los lineamientos generales de cara su mandato junto a Carolina Rossi en la UCR local, a semanas de iniciarse, algo de historia, presente y futuro del centenario partido, y reflexiona sobre el reciente triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
-¿Qué tareas realizas en el senado de la nación?
–Pertenezco a la planta permanente del senado. Se van a cumplir 33 años de mi ingreso (Diciembre de 1983 con 19 años). Desde hace ocho años ejerzo una función directiva en ámbitos estables medios, del área de investigaciones y capacitación. Hace tres meses Gabriela Michetti, Juan Pedro Tunesi y Helio Rebot, suprimieron un organismo antiguo de la casa y constituyeron una dirección general mucho más ágil y más chica la de investigación y capacitación. En esa dirección soy el flamante y primer director de capacitación parlamentaria del senado, lo que es todo un honor para mí y a la vez un desafío. Mi tarea es capacitar y, junto a mi equipo humano, sacar del personal del congreso buenos gestores en labor legislativa.
-¿Para qué sirve esto?
-Sirve para mejorar y para ser más útil y eficaz, más fácil de leer y comprender, el principal producto que genera el poder legislativo, que es la ley. La ley es la que nos gobierna, nos iguala, nos ordena. Esto genera que sea mejor en su calidad. Es para lograr que ese producto que se plasma en una ley sea una mejor herramienta que nos genere un bienestar para todos los argentinos.
-¿Cómo ves a cambiemos a nivel nacional, provincial y local?
-Está sufriendo el cenit de la crisis que sabíamos que nos esperaba cuando alcanzáramos las administraciones provinciales y nacionales. Tenemos un presidente que escucha mucho y que todavía está saliendo de la recesión. La economía no se recalienta como esperamos todos, se notan coletazos provocados por los sectores que están más excluidos de la distribución del ingreso y de la renta nacional. Éste es nuestro gobierno y tenemos que defenderlo, no me quedan dudas de que vamos a estar mejor.
María Eugenia Vidal es una de las figuras más reveladoras de la política Argentina. Tiene una enorme imagen positiva porque tomó el toro por las astas y se está ocupando de temas que habían quedado olvidados como la seguridad y las obras públicas.
En Luján en 2011 fuimos pioneros con nuestro espíritu frentista y esto fue reconocido por dirigentes de primer nivel, cómo Ernesto Sanz, Daniel Salvador, Julio Cobos, entre otros. La primera gestión de Oscar Luciani fue discreta sin grandes avances, nos tocó sanear las cuentas públicas. Hoy está más subido al tractor tirante de cambiemos, pero el radicalismo fue, es y será para cambiemos la columna vertebral de la estructura y organización política y de la campaña desafiante del 2017. No va a haber un cambiemos exitoso sin un radicalismo unido.
-¿Cómo ve la relación de Macri con Donald Trump?
-No hay otra alternativa que tener una relación madura. Nuestro gobierno se ha caracterizado, a diferencia de los de Menem o los de Cristina Fernández y Néstor Kirchner en no tener encolumnamientos. No somos furgón de cola de ninguna ideología ni de ninguna gestión. Defenderemos en cada ámbito lo que mejor asegure los intereses de la Argentina. La política de Malvinas y los principios históricos que siempre mantuvo la Argentina.
-¿Cómo definís a Carolina Rossi?
-Es un honor acompañar a Carolina en este mandato de dos años. Es una prometedora joven con mucha pujanza. Es una gran dirigente que tiene mucho para darnos. Resultar electa en una elección donde participaron muchos afiliados y venir de la juventud radical es un muy buen plafón para una promisoria carrera política. Apuesto por ella porque la respeto y me siento escuchado.
-¿Cuáles serán las medidas que tomaran?
-Nuestra tarea es con la gente. Vamos a seguir timbrando y preguntándole a los afiliados y vecinos como están las cosas en los barrios. Canalizaremos en lo que dependa de nosotros hacia las autoridades municipales, advirtiendo que no siempre está a nuestro alcance la solución. Además formaremos un programa de formación y capacitación política partidaria e histórica destinada a los jóvenes que se acercan día a día al comité.
-¿Cuál es la problemática que más le preocupa?
– Los sectores más carenciados que no tienen acceso a una cobertura de salud no la están pasando bien. El hospital está saturado en su prestación de servicios. No puede cerrarle la puerta a nadie que venga a pedir por su atención. Lamentablemente faltan insumos imprescindibles, mínimos y están reprogramando cirugías urgentes para fechas donde la salud corre peligro. La salud es algo elemental para la calidad de vida de las personas.
-¿Cuál considera que fue el mejor gobierno Radical de la historia?
-El gobierno de Marcelo Torcuato de Alvear, entre 1922 y 1928 fue impecable. Fue el gobierno más progresista, siendo que Alvear tiene puesta una etiqueta injusta de cierto conservadurismo, y conservadurismo en Argentina está impregnado de de una suerte de desvalor. Sin embargo, el gobierno de Alvear no solo fue progresista sino que no hubo intervención federal en seis años de gobierno, un gran respeto por las instituciones, una gran inserción de la Argentina en las naciones del mundo y la promulgación y el dictado de muchas leyes de contenido social, que parecen no creíbles viniendo de un Alvear que era un aristócrata pero que sabía muy bien para que había llegado a ser presidente de la nación.
-¿Cómo se encuentra el Radicalismo en la actualidad?
-Creo que está mejor que hace algunos años. Incluso integra el frente y la coalición gobernante nacional. Es fundador de Cambiemos, que ha llevado a Mauricio Macri y Gabriela Michetti a los primeros cargos de la magistratura nacional. Pero no llegamos al gobierno para un reparto de cargos, sino para desalojar esta suerte de justicialismo reciclado en sí mismo y creo que ha sido un gran éxito. Hubiera sido muy difícil luego, porque Daniel Scioli nos ofrecía más de lo mismo.
Sin embargo, nos las hemos pasado la mayor cantidad de la historia del partido como oposición, que no está mal, pero un partido político debe aspirar a conducir el poder.
-¿Qué debiera suceder para volver a tener un gobierno Radical?
-Seguir con la bandera que tuvimos siempre y no bajarlas nunca. Además de tomar y poner en práctica la demanda de la sociedad. Hace falta un líder carismático que ayude. Uno de ellos podría ser Ernesto Sanz o el ingeniero Cobos.